jueves, 16 de noviembre de 2006

15 años luchando en el CURZA (UNCo)


Recuperar la Universidad Tomada. Democratizar.


Resistiendo, oponiéndonos a la normalidad, a las cosas que dicen que funcionan y ocultan su defunción. Luchando, equivocándonos encontramos aciertos, 15 años no es nada y es mucho, quince años es resistir al tiempo y a la tendencia a desaparecer que se abalanza sobre la Universidad de una manera tan banal que ni se siente. Imperceptible porque se desaparece en la normalidad, que nos hace desaparecer. Valga la redundancia.
Democratizar es reaparecer en cada instante, en cada espacio, en cada rumbo. Poner las patas estudiantiles y renovadas en esta universidad que hace décadas está tomada, y no por los estudiantes que cada tanto la toman simbólicamente para gritarle a la normalidad que su día se acerca, que el movimiento estudiantil despierta y quiere recuperar lo que le robaron desde su nacimiento.
Cuando empezamos nos oponíamos a la universidad capitalista y sus estrategias contra la universidad del pueblo. Ahora también nos oponemos a esa universidad capitalista y su autismo para con la construcción social. Pero decir capitalismo nos queda corto para describir y luchar contra la emergencia de las fuerzas que se oponen a la construcción de la universidad que queremos. Que no es cualquier universidad, porque el decano también quiere una, y lo dice y piensa construir una ensoñando tranqueras que la separen cada vez más del afuera.
Y los estudiantes somos de afuera, y sentimos nuestra la universidad como de afuera y por lo tanto la universidad que queremos tiene que estar a la altura de donde pertenece, su pueblo, con un buen nivel académico científico, pero a su vez con un buen nivel de apertura a las transformaciones y a las necesidades sociales. A la producción de comunidad y no de mercancías vacías de contenido.
Estos objetivos quedan postergados cuando lo que sostiene a la universidad no es un ideal social de ésta, sino una burocracia universitaria y una casta de profesores que lo único que buscan es mantener el status quo (para decir de una manera elegante que lo único que les interesa es su sueldo y que nada estorbe en pos de una universidad mejor, la posibilidad de seguir vacacionando en la costa o comprarse el plasma de 30 pulgadas). Así se deja de lado la función social de la universidad y su calidad académica por la preeminencia de mediocres en los espacios de poder que imponen su modelo de sociedad estratificada. La vieja universidad. La mayoría docente que con un discurso contradictorio rema para el lado de la mercantilización de nuestros conocimientos, operan para desorganizarnos e inculcarnos que "es natural" que las cosas funcionan como funcionen.
Somos de afuera, ahí debe pertenecer la Universidad Pública.Cualquiera que haya presenciado algunas de las reformas de los planes de estudio, habrá advertido la tendencia existente a que esas reformas se tornen en una repartija de cargos más que en un replanteo de las carreras, para contribuir a la construcción de comunidad. Así luego salen graduados capacitados para seguir estudiando, pero no para trabajar en esa construcción y la universidad pierde credibilidad y valor para la sociedad que se refugia donde puede.
Participación vs Demagogia
Frente a esta lógica de la normalidad que empobrece a la universidad en todas sus dimensiones, políticas, culturales, científicas, artísticas, afectivas, el DEMO alza una vez más las banderas de la DEMOCRATIZACIÓN, de la mayor participación de los estudiantes en las decisiones que inciden en el destino de la universidad.
Participar de las decisiones no bastará si en ese decidir no se contempla que la orientación de ellas esté dada hacia la universidad del pueblo y no hacia la universidad de las empresas, los partidos políticos o los palaciegos que la gobiernan.
Participar cobra sentido cuando ese participar es libre de una voluntad impuesta. Impuesta como la tienen algunas agrupaciones cuya única participación radica en sujetarse a las ordenes de un partido (o lo que kede de él) o de un decano aletargado y aparecer dos semanas antes de las elecciones, para luego estar un año, indiferentes a los problemas de la universidad, alabando sus hazañas épicas. sus HECHOS, que consistieron en televisar el mundial, poner un termo de agua, juntar firmas para el asueto primaveral, o alguna otra acción de renombre con la ayuda del partido o de alguna maestría afín. Como actos demagógicos aproximándose a las elecciones, reparten becas de fotocopias e inauguran un comedor con plata del estado (¿o de una peña paupérrima?) pagándole a un privado pudiendo hacer con el mismo dinero un proyecto de gestión estudiantil y comunitaria, y haciendo además un escrache estigmatizante, poniendo en la puerta de la confitería el listado de los beneficiarios en pos de mostrar sus bondades a quienes los elegirán.
Dicen que tienen hechos y no palabras, porque hace mucho que carecen de palabras para defender su indignidad política, como tampoco tiene esa dignidad el decano que ellos eligieron, involucrado en actos eleccionarios fraudulentos, calificados por la Justicia Federal como ilegales "típicos de la viveza criolla" para pisotear a las minorías. La misma viveza de la que hacen uso sus partidarios lokales, sumándose al proyecto del presidente, por el sólo hecho de akumular poder. Estas agrupaciones funcionan en la misma lógica desinteresada de akumulación. La universidad ausente.

¿Qué podemos hacer los estudiantes?
Dentro de esta declaración de guerra a la normalidad del "orden" académico, nuestros aportes consisten por un lado, en la construcción de un movimiento estudiantil autónomo y revolucionario, que piense y decida por sí mismo y se presente como un sector más en la lucha por una sociedad igualitaria. Por otro lado los estudiantes tenemos la posibilidad de asistir a una universidad "publica" que por más gratuita que sea le cierra las puertas a una gran parte de la población de nuestro país, debido a la falta de presupuesto, de becas (de promoción y no de asistencia) de políticas educativas integradoras, generadoras de lazo social.
El centro de estudiantes... ¿Gremio o Kiosco de trámites?. En este caso vamos por el centro de estudiantes, que es el equivalente a un gremio, como lo tienen distintos sectores de la sociedad, que defienda los intereses de los estudiantes y de los estudiantes como parte integral del afuera. Se trata de construir un movimiento estudiantil como sujeto histórico dentro del campo popular y no tan sólo como garante de los intereses individualistas.
Con esa visión individualista, algunas agrupaciones se lanzaron por nuestros órganos gremiales (el Centro de Estudiantes) con el sólo fin de obtener puestos en el gobierno, o trepar dentro del partido. Así vacían al Centro de participación en las luchas sociales (por ejemplo Democratización) y discusión política, transformándolo en un kiosco de trámites y servicios. Ni siquiera son capaces de generar lazo social hacia el interior de sus agrupaciones, siempre divididos y unidos por unas monedas como sus correligionarios.
Los logros obtenidos en la historia de la Universidad argentina, dan cuenta que con la participación del estudiantado movilizado se pueden lograr muchos de los objetivos aquí planteados. Es por eso que seguimos haciéndole frente y que estos 15 años del DEMo no han logrado doblegar las luchas.
Que nos equivocamos muchas veces no potenciando los espacios de lucha, está demás decirlo, pero así se forjan los caminos y es mejor equivocarse en libertad que equivocarse bajo la tutela de un partido o un sector que jamás asoma por la realidad universitaria.
El Centro de Estudiantes debiera ser siempre una trinchera de lucha desde donde se gesten las decisiones del mañana. Para eso los que tenemos la posibilidad de acceder a la Educación deberíamos poner nuestros conocimientos al servicio de las luchas de los sectores oprimidos. El conocimiento no es neutral a quien lo utiliza, no es apolítico y quienes así lo plantean lo hacen para ocultar su posición privilegiada en la sociedad. El conocimiento puede servir como herramienta para la dominación ocultando su ideología, o puede servir como herramienta para la liberación. Quien lo oculta, ya elogió de que lado está.

1 comentario:

Anónimo dijo...

aguante el DEMO

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